Jefa del grupo Genética y Mejora del Maíz de la Misión Biológica de Galicia (MBG).

¿Cuándo comienza a desarrollarse la línea de investigación del grupo y cómo ha ido evolucionando?

Comienza a mediados de los años 70. En un principio, se recolectaron variedades locales de maíz, se caracterizaron, se organizó un sistema de conservación y se empezaron programas de mejora basados principalmente en el aumento de la producción. A partir de los años 90 se empieza a contemplar la mejora de la resistencia y/o tolerancia a diversos estreses bióticos y abióticos para contribuir al desarrollo de una agricultura más sostenible. En la actualidad, además de incorporar herramientas de las distintas ómicas, estudiamos en profundidad los mecanismos de resistencia que utilizan las plantas frente a dichos estreses. Así, pretendemos el manejo eficiente de la diversidad genética del maíz para aumentar la sostenibilidad, resiliencia, rentabilidad y calidad del cultivo. Investigamos con maíz para alimentación animal -piensos (desde el inicio del grupo) y forrajes (desde hace cinco años)- y humana – panadería (desde el 2000), maíz dulce (desde los años 80) y maíz de palomitas (desde hace 15 años).

¿Qué papel otorgan a la transferencia?

Hemos tenido contratos con empresas para el desarrollo y evaluación de variedades comerciales de maíz y actualmente hay una empresa panadera interesada en el pan de maíz. En estos momentos los agricultores ecológicos y productores de harinas para panificación demandan productos que no están en el mercado español y nosotros trabajamos para suministrarles variedades mejoradas que cubran esas demandas. Del mismo modo, iniciamos trabajos de mejora de otros aprovechamientos del cultivo de maíz (forraje, bioetanol, industrial, etc). Desde sus inicios, el grupo ha sido muy activo en la recolección, conservación y caracterización de los recursos fitogenéticos de maíz, lo que permite ofrecer al sector el tipo más adecuado para sus necesidades y si no lo tenemos sí disponemos del conocimiento para desarrollarlo.

¿Podría poner algún ejemplo en el que las investigaciones que desarrollan hayan dado un resultado de especial relevancia?

La creación de un banco de germoplasma de maíz donde se conservan las principales variedades de maíz de España. Además, están caracterizadas, lo que facilita su utilización en programas de mejora. A ello se une el desarrollo de programas de mejora a largo plazo, lo que nos ha permitido obtener materiales (líneas puras y poblaciones mejoradas) únicos con características especiales como son la adaptación al medio, resistencia a estreses y mejor calidad. También, el desarrollo de poblaciones de mapeo para estudios genéticos que ha permitido conocer las regiones genómicas asociadas a los caracteres de importancia económica. Por otra parte, hemos profundizado en el papel que juega la pared celular en la tolerancia a estreses y en la optimización del maíz para otros usos como pueden ser forraje o producción etanólica. En concreto, se ha confirmado que la fortificación de las paredes celulares es un mecanismos de defensa constitutivos frente al ataque de los taladros.

¿En qué momento se encuentran sus investigaciones? ¿Está cerca de alcanzar sus objetivos, necesita abrir nuevas líneas de trabajo o debe continuar en la misma línea que hasta ahora para seguir avanzando?

El objetivo general del grupo, el uso de la biodiversidad del maíz para obtener un cultivo sostenible frente a las amenazas del cambio climático, está de actualidad porque incide en la consecución del cometido 2 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de conseguir el hambre cero. Por tanto, debemos continuar avanzando en esta línea para contribuir a que ello se consiga. En cuanto a las líneas de investigación más antiguas, se ha avanzado notablemente, particularmente en resistencia a los taladros y a frío. En respuesta a la demanda social y científica, se han abierto nuevas líneas que están empezando a dar frutos interesantes. Así, por ejemplo, la resistencia a la sequía y a las altas temperaturas, así como la resistencia a nuevas plagas y enfermedades o el aumento de la contaminación con micotoxinas son retos en los que ya estamos inmersos.

¿Podría indicar un objetivo a corto plazo, medio y largo plazo para el grupo de investigación?

A corto plazo, utilizar la biodiversidad del maíz para desarrollar programas de mejora a la ‘carta’, así como la identificación de materiales y desarrollo de herramientas con las que obtener a largo plazo, mediante programas de mejora específicos, variedades para transferir al sector; a medio y largo plazo, avanzar en el conocimiento básico de la interacción planta-parásito-ambiente, planta-estrés-ambiente y en el desarrollo de variedades con mayor valor añadido.

El grupo Genética y Mejora de Maíz

  • Año de creación: 1974.
  • Fundadores: Amando Ordás Pérez.
  • Presentación: Desarrollar nuevos conocimientos sobre cómo obtener variedades más productivas, resilientes y de calidad producidas en condiciones sostenibles utilizando la biodiversidad del maíz.
  • Plantilla: 18 personas.