Vigo, 1965. Licenciada (1988) y doctora (2002) en Biología por la Universidad de Santiago de Compostela (USC).

Sus líneas de investigación se centran en el cultivo in vitro de especies leñosas autóctonas (castaño, roble, alcornoque, mimbre, avellano, almendro, ciruelo, cerezo…) para su conservación, propagación y estudio de los procesos de regeneración.

Ha desarrollado protocolos de crioconservación, transformación genética y cultivo en biorreactores, así como actividades de divulgación y de aprendizaje y servicio en colaboración con asociaciones y entidades educativas.

Desde 2009 es científica titular del CSIC (antes fue técnica de grado Medio). Desarrolla su labor en la Misión Biológica de Galicia, sede Santiago de Compostela, en el el grupo Biotecnología de Especies Leñosas dirigido por Concepción Sánchez Fernández.

Recientemente el citado grupo fue el organizador de la primera conferencia de la Acción COST COPYTREE.

En la Acción, liderada desde la Universidad de Gante (Bélgica) y centrada en la investigación, producción y conservación de especies leñosas, participa el CSIC. ¿En qué consiste tu participación?

La Acción está centrada en la innovación en la clonación de plantas leñosas, que coincide plenamente con los objetivos de nuestro grupo de investigación, pues habíamos participado activamente en la preparación de la propuesta, mediante reuniones on-line durante varios meses.

Actualmente formo parte del “Management Committee” (Comité de gestión), constituido por dos personas de cada país miembro de la Acción, y me ocupo también de uno de los cinco grupos de trabajo, el dedicado a la automatización del cultivo in vitro. Por tanto, mi participación es tanto científica como organizativa. Intentamos detectar las necesidades de investigación en nuestro campo, establecer colaboraciones con otros laboratorios/empresas de la Acción y asignar los recursos económicos de forma eficiente.

¿Por qué se organizó esta Conferencia en España y, concretamente, en Santiago?

Esta conferencia no estaba prevista para Santiago en este año. La idea era realizarla en Adana, Turquía, pero debido al terremoto hubo que buscar una alternativa de forma urgente. Al pertenecer al comité de gestión tocaba “arrimar el hombro”, y propuse intentar organizar la reunión aquí. Santiago es una ciudad relativamente pequeña, pero con buenas infraestructuras científicas y también en lo que se refiere a vías de comunicación, hoteles, restaurantes… Consulté si había disponibilidad de alojamiento, pedí permiso al CSIC y nos pusimos en marcha.

¿Cómo explicarías al público general, no familiarizado con la investigación, lo que es una acción COST?

Las siglas COST significan Cooperación Europea en Ciencia y Tecnología. Esta organización, que obtiene sus fondos básicamente de la Unión Europea, financia un tipo especial de proyectos, las Acciones COST, cuyo objetivo es crear redes de colaboración entre personas de varios países interesadas en un sector concreto de la investigación.

En una Acción COST pueden participar universidades, centros de investigación, empresas, asociaciones, organizaciones no gubernamentales…. Lo que se financia es la organización de reuniones, congresos, estancias cortas en laboratorios de otros países, cursos para aprender nuevas técnicas. La filosofía es la colaboración y compartir conocimientos, con el objetivo de aunar fuerzas para solucionar problemas técnicos y/o científicos.

Asistieron más de 100 personas de diferentes países y entidades. ¿Qué fue lo más gratificante y lo más complejo de la organización del evento?

Lo más gratificante fue el alto grado de participación en las sesiones científicas y la buena disposición de la gente. Las charlas fueron muy interesantes y hubo interacción entre los asistentes, pero sobre todo el ambiente fue distendido y la gente disfrutó del congreso y de la ciudad. Verlos sonreír te compensa el esfuerzo.

Lo más complejo fue el poco tiempo que tuvimos para organizar la reunión, solo dos meses cuando normalmente son seis. Como consecuencia, hasta prácticamente diez días antes no sabíamos si teníamos que preparar espacios, paneles para posters, libros de resúmenes, y contratar el catering para 80 o 120 asistentes. Pero tuvimos ayuda y comprensión de mucha gente, como las responsables de la oficina de congresos de la USC, la imprenta Lápices4, SEREGA que se ocupó del catering, la agencia de viajes El Camino…. Todos nos dieron todas las facilidades y todo el ánimo posible. Quiero mencionar especialmente el apoyo del decano de la facultad de Química, donde se realizó el evento, y del gerente de nuestro centro en Santiago. Sin su implicación el congreso no habría sido posible.

El evento duró dos días. ¿Cómo se estructuró, a grandes rasgos, el programa?

El congreso en sí duró dos días, pero continuó con dos excursiones no obligatorias que cada asistente se financió por su cuenta, en las que los que pudimos quedarnos tuvimos oportunidad de interaccionar de una forma más distendida.

Los dos primeros días los grupos de investigación presentaron sus trabajos sobre temas emergentes en la propagación in vitro de especies leñosas en forma de posters y de charlas, la mayor parte bastante cortas (10 minutos), aunque hubo cuatro charlas más largas a cargo de expertos en un área específica. Los asistentes podían hacer preguntas o comentarios directamente a los autores durante las sesiones de posters o después de las charlas. Tengo que reconocer que el programa fue bastante intenso. Si lo volviera a hacer ahora pondría menos charlas y más tiempo para comentar ideas durante los cafés.  

En la parte social tuvimos la clásica cena de gala y una visita a la ciudad, que incluyó naturalmente los árboles monumentales. Muchas personas venían a Galicia por primera vez, así que quisimos mostrar un poco de mar y un poco de la zona interior. La primera excursión fue a Fisterra (incluyendo Pontemaceira, Muxía, Ézaro y Carnota) y la segunda al monasterio de Carboeiro y los jardines de 2 pazos de la contorna, el de Oca y el de Santa Cruz de Rivadulla, para que disfrutasen de nuestros árboles y flores.

¿Cuáles fueron los principales resultados obtenidos fruto de este encuentro?

El primer resultado fue ponernos cara y voz a todos, y compartir en directo los proyectos en los que estamos implicados en este momento. A partir de ahí han surgido propuestas de colaboraciones entre varios grupos, y estoy segura de que surgirán más.

¿Cuáles serán las próximas acciones contempladas en el marco de esta acción COST?

En este momento están en marcha las STSM (Short Term Scientific Missions). Son estancias cortas en laboratorios de otros países, para aprender una técnica o iniciar una colaboración. Además, a finales de septiembre organizaremos en Turquía un curso de tres días de duración sobre la utilización de biorreactores en el cultivo in vitro, al que esperamos que acudan 15 alumnos/as de diferentes países.