El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en Galicia está comenzando a trabajar en los doce proyectos para los que han captado financiación en la convocatoria pública competitiva  2015 del Programa Estatal de Investigación, Desarrollo e Innovación orientado a los retos de la sociedad.

En estas semanas, se están celebrando ya las primeras reuniones de trabajo con el resto de entidades participantes en cada proyecto, a fin de concretar las fases y las tareas de cada investigación.

Los cuatro proyectos de la Misión Biológica de Galicia  (Pontevedra)

El Grupo de Genética, Mejora y Bioquímica de Brásicas inicia el proyecto “Metabolitos secundarios en Brassicaceae: implicaciones en la mejora genética y resistencia vegetal de brásicas hortícolas”, con Elena Cartea González y Pilar Soengas Fernández como investigadoras principales. Está financiado con 165.000 euros.

El objetivo es estudiar los principales metabolitos secundarios presentes en los cultivos de la familia Brassicaceae (grelos, coliflor, repollo…) relacionados con la defensa de la planta a estreses bióticos y con propiedades beneficiosas para la salud, así como la mejora genética de brásicas hortícolas con el fin de obtener variedades con valor añadido debido a su adaptación, resistencia a estreses bióticos y calidad nutricional.

El Grupo Genética y Mejora de Maíz inicia el proyecto “Mejora genética de la resistencia y mecanismos de defensa del maíz frente a factores bióticos”, con Rosa Ana Malvar Pintos y Ana Butrón Gómez como investigadoras principales. Está financiado con 130.000 euros. En este caso se trata de un proyecto coordinado con el grupo de Agrobiología Ambiental. Calidad de Suelos y Plantas  de la Universidad de Vigo, encargándose de la coordinación las investigadoras de la MBG

El objetivo del proyecto es incrementar el conocimiento sobre los mecanismos de resistencia del maíz frente a estreses bióticos, en particular a la plaga de los taladros y a infecciones del hongo Fusarium  para evitar la enfermedad y la contaminación con fumonisinas producidas por el hongo.

El Grupo Genética y Ecología Forestal ha obtenido financiación para dos proyectos.

Por una parte, “Dinámica reproductiva y estrategias defensivas en pinos mediterráneos: relevancia para la gestión futura de sus recursos genéticos”, cuyo investigador principal es Rafael Zas Arregui y cuenta con una financiación de 130.000 euros.

El objetivo es incrementar la comprensión sobre la capacidad adaptativa de los pinares de España al cambio global y determinar estrategias de gestión de los recursos genéticos forestales que garanticen la persistencia de las masas y el mantenimiento de la biodiversidad intraespecífica.

Por otra parte, “Factores que determinan la existencia de síndromes defensivos en especies del género Quercus en la Península Ibérica: implicaciones para la conservación de especies amenazadas”, cuyo investigador principal es Xoaquín Moreira Tomé y cuya financiación es de 35.000 euros.

El objetivo es estudiar factores bióticos y abióticos que potencialmente podrían determinar los síndromes defensivos en las especies del género Quercus en la Península Ibérica. De manera más específica, el reto de este proyecto es proporcionar un mayor conocimiento sobre las estrategias defensivas de estas especies forestales, lo cual será fundamental para la toma de decisiones en futuros planes de conservación y mejora genética de estas especies, generando a su vez importantes beneficios a nivel social y económico.

 Todos estos proyectos tienen una duración de tres años.

 Los seis proyectos del Instituto de Investigaciones Marinas (Vigo)

 El Grupo Inmunología y Genómica inicia el proyecto “Variabilidad y función de genes inmunes del mejillón Mytilus Galloprovincialis”, cuyo investigador principal es Antonio Figueras Huerta y cuya financiación es de 170.000 euros.

El objetivo principal del proyecto es mejorar el conocimiento sobre la respuesta inmune del mejillón cultivado en Galicia, especialmente sobre la variabilidad genética, transcriptómica y funcional de genes con función inmune como los peptidos antimicrobianos (AMPs).

El Grupo Ingeniería de Procesos inicia el proyecto “Un enfoque basado en modelos multiescala para entender los mecanismos de adaptación de las especies no convencionales del género Saccharomyces en fermentaciones vínicas”, con Eva Balsa Canto como investigadora principal. La financiación es de 125.000 euros.

 El objetivo es la generación del conocimiento y las herramientas necesarias para el diseño de nuevos procesos fermentativos basados en el uso de especies como S. uvarum y S. kudriavzevii. Para ello plantea dos objetivos fundamentales: el estudio metabólico, utilizando una aproximación de biología de sistemas multi-escala, de estas especies y S. cerevisiae, y la mejora, a través de evolución adaptativa e ingeniería metabólica, de la tolerancia a etanol de ambas especies mientras se mantienen sus atributos.

 El Grupo Biología y Fisiología Larvaria de Peces comienza la investigación “Implicación de la alimentación de los progenitores y de la disponibilidad de cobertura vegetal en la viabilidad de Hippocampus Guttulatus: simulación en cautividad”. El investigador principal es Miquel Planas Oliver y la financiación 52.000 euros.

El objetivo es demostrar mediante simulación en cautividad que la alimentación de los progenitores y la disponibilidad de elementos de sujeción de los juveniles del caballito de mar Hippocampus Guttulatus (especie protegida) pueden ser dos factores importantes en la viabilidad de la descendencia, pudiendo afectar a la conservación de la especie en el medio natural.

El Grupo Ecología Pesquera inicia el proyecto “Dinámica del reclutamiento de la merluza europea”, con Juan Francisco Saborido Rey como investigador principal y una financiación de 200.000 euros.

El objetivo general es analizar las causas que determinan el reclutamiento en la merluza europea con especial atención a las causas demográficas y ambientales; y en particular estudiar la posibilidad de que la presión pesquera y el cambio climático estén determinando los pulsos de reclutamiento, invirtiendo las tendencias históricas y favoreciendo la población del norte.

El Grupo Laboratorio de Geoquímica Orgánica inicia el proyecto “Flujos de carbono en un sistema de afloramiento costero (Cabo Blanco, NO de África): caracterización elemental, óptica, isotópica y molecular”, con X. Antón A. Salgado como investigador principal y una financiación de 145.200 euros.

El objetivo es cuantificar la contribución del carbono orgánico disuelto (COD) y en suspensión (COP), es decir aquel que no sedimenta rápidamente, a la bomba biológica en la región de Cabo Blanco (NO de África), donde la interacción del sistema de afloramiento con el Frente de Cabo Verde da lugar al Filamento Gigante de Cabo Blanco.

El Grupo Ecobiomar inicia “Demografía y relaciones tróficas de larvas de calamar en un área oceanográfica de afloramiento: hacia una aproximación ecosistémica de la gestión de este recurso”. El investigador principal es Ángel F. González González y la financiación es de 165.000 euros.

El proyecto representa una continuación de la línea de investigación que Ecobiomar está desarrollando durante los últimos quince años en aguas del Atlántico Noreste. El principal objetivo es el estudio de la demografía y relaciones tróficas de larvas de calamar en un área de afloramiento costero para avanzar hacia una aproximación ecosistémica para la gestión de este recurso de importancia socioeconómica.

 Todos los proyectos del IIM tienen una duración de tres años.

 Los dos proyectos del Instituto de Investigaciones Agrobiológicas de Galicia (Santiago de Compostela)

El Grupo Enzimología del Suelo inicia el proyecto “Propiedades bioquímicas del suelo como indicadoras del riesgo ambiental de líquidos ionicos (LIS) propuestos como absorbentes en bombas de calor”, financiado con 70.000 euros y cuya investigadora principal es Carmen Trasar Cepeda. Tiene una duración de tres años.

El objetivo es investigar la toxicidad para el suelo de líquidos iónicos cuyas propiedades temofísicas los hacen adecuados para su uso en bombas de calor por absorción. La toxicidad se determina mediante experiencias de laboratorio en las que se investiga la modificación de las propiedades bioquímicas y biológicas del suelo. El fin último es seleccionar, de entre los múltiples líquidos que podrían cumplir las condiciones que les permitan ser utilizados en dichas bombas, aquellos cuya toxicidad para el medio ambiente es menor, evitando la fabricación y uso de aquellos que puedan resultar más tóxicos.

El Grupo Microbiología inicia el proyecto “Potencial de la fito-minería para la recuperación sostenible de Ni y otros elementos estratégicos a partir de antiguas escombreras de mina”, financiado con 175.000 euros, con Petra Susan Kidd y Ángeles Prieto Fernández como investigadoras principales y una duración de cuatro años.

El proyecto está orientado a la aplicación de técnicas de fitominería para el aprovechamiento de elementos como el niquel, que tienen alto valor comercial, a partir de materiales como las escombreras de minas y canteras, en los que la concentración de los elementos valiosos es baja y no resulta rentable su explotación con técnicas mineras convencionales. Se trabajará con plantas hiperacumuladoras (como Alyssum serpyllifolium subespecie lusitanicum, endémica en suelos ricos en Ni de Galicia y N de Portugal) que son capaces de concentrar Ni en sus tallos y hojas en grandes cantidades. Además se propone realizar prospecciones para identificar otras especies vegetales que puedan ser interesantes para la extracción de otros elementos de elevado valor comercial y clasificados como materias críticas por la UE.